Nueva versión de las Reglas de York-Amberes sobre avería gruesa

En el marco de la Asamblea del Comité Marítimo Internacional (CMI), celebrada en Nueva York en mayo de 2016, se aprobaron las reformas de las Reglas de York-Amberes, versión 2016. La novedad es que este año se publicó también una guía interpretativa que, si bien no tiene carácter vinculante, puede ser utilizada para lograr una mejor interpretación de las reglas y, por ende, su mejor aplicación.

La primera versión fue aprobada en 1864 con el objetivo de promover un sistema uniforme para resolver casos de avería gruesa. El CMI se encarga de revisar las reglas y actualizarlas, con el fin de adaptarlas a las diferentes realidades que se presentan en el comercio internacional a través de los años.

Es importante resaltar que nuestro ordenamiento jurídico receptó la versión de 1950 al establecer, en la Ley de Navegación que “los actos y contribuciones en concepto de avería común se rigen, salvo convención especial de las partes, por las Reglas de York-Amberes, texto de 1950” (artículo 403 de Ley N° 20.094). Esta norma otorga primacía a la autonomía de la voluntad de las partes, lo que permite que los contratantes opten por utilizar el último texto de las reglas disponible, si así lo desearan.