No toda infracción marcaria presupone la existencia de daños

DC Shoes Inc. promovió demanda por cese de uso de marca y daños y perjuicios a fin de que se ordenara al demandado, Siete Nueve Tres San Rafael, a cesar en todo uso de la marca objetada y a resarcir los daños producidos. La Sala 3 de la Cámara Federal hizo lugar al cese de uso requerido pero rechazó la acción de daños y perjuicios (CNACCF, Sala 3, 10/09/2015, causa 12.706/07, “DC Shoes Inc. c. Siete Nueve Tres San Rafael S.A. s/ Cese de uso de marcas y daños y perjuicios”). 

Existe un amplio consenso entre las distintas Salas de la Cámara de Apelaciones en lo Civil y Comercial Federal, compartido también por gran parte de la doctrina, en el sentido de que el uso indebido de una marca genera a su titular un daño que debe ser resarcido.

En este caso, mientras el tribunal de primera instancia consideró que la utilización de la marca del actor por el demandado constituía un uso de buena fe y, por lo tanto, no existía infracción, la Cámara Federal sostuvo que no existían dudas de que el uso objetado constituía una infracción que su titular tenía derecho a impedir, con independencia de la buena o mala fe del demandado.

No obstante, la Cámara Federal rechazó la acción por daños y perjuicios presentada por el actor en el entendimiento de que no cabe prescindir del principio jurídico que pone en cabeza del que invoca un perjuicio la prueba de su existencia.

De esta manera, consideró que el actor no había aportado elemento alguno para tener por probadas sus alegaciones en el sentido de haber sufrido pérdida de ventas y clientela ilegítimamente desviada.

Este caso resulta de importancia toda vez que refuerza la idea de que el titular marcario debe acompañar elementos de prueba suficientes como para tener por probado el daño alegado.