ACUMAR. El control de la actividad industrial se fuerza desde la justicia

La Autoridad de Cuenca Matanza Riachuelo (“ACUMAR”), ente interjurisdiccional autónomo creado por ley, e integrado por la Nación, la Ciudad de Buenos Aires, la Provincia de Buenos Aires y los 17 municipios que integran la cuenca Matanza Riachuelo, viene desarrollando planes de control, sanción y reconversión industrial en cumplimiento de uno de los objetivos primarios impuestos por la Corte Suprema de Justicia de la Nación al ordenar la remediación de la contaminación de la cuenca Matanza Riachuelo: el cese de vertidos industriales contaminantes.

Según información de ACUMAR, en la Cuenca Matanza Riachuelo existen 24.842 industrias registradas y sujetas a control. Según estadísticas a febrero de 2012:

1.085 industrias han sido declaradas Agente Contaminante,
733 industrias de las declaradas Agente Contaminante han presentado un Plan de Reconversión Industrial;
398 Planes de Reconversión Industrial han sido aprobados por ACUMAR;
254 se encuentran en etapa de ejecución; y
9 industrias han sido reconvertidas.

En resumen, del total de industrias declaradas Agente Contaminante, menos del 25% se encuentra ejecutando un Plan de Reconversión Industrial.

Esta cifra se traduce, en gran medida, en la demora que existe en el órgano de administración controlante para aprobar los planes de reconversión presentados por los infractores. Y si a ello se le suma que ACUMAR suele decretar la clausura preventiva de los establecimientos sancionados hasta que se apruebe el Plan de Reconversión Industrial, se infiere fácilmente que hay un importante número de industrias clausuradas a la espera de una decisión administrativa demorada.

El Juez Federal de Quilmes, único competente para controlar el programa de remediación de la cuenca Matanza Riachuelo por disposición de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, viene dictando desde 2009 una serie de fallos tendientes a sostener el nivel de control sobre las actividades industriales. Para ello, por ejemplo, ha impuesto sanciones de multa de carácter personal a los funcionarios públicos que no han cumplido con los cronogramas de ejecución por él exigidos.

El 14 de febrero de 2012 el Juez Federal de Quilmes(1) exhortó (nuevamente) a ACUMAR a (i) ejercer adecuadamente todas las actividades que resulten necesarias para controlar a las industrias contaminantes de la Cuenca, incluyendo el monitoreo continuo y permanente sobre ellas, y (ii) informar el nivel de cumplimiento de los Planes de Reconversión Industrial aprobados.

En la misma decisión el Juez intimó a los intendentes de los municipios que integran la cuenca Matanza Riachuelo a informar –mensualmente- a ACUMAR y al propio Juez sobre las industrias que, en cada jurisdicción, produzcan efectos contaminante o supuestamente degradantes para el ambiente.

Según menciona la propia sentencia, esta última decisión responde a la necesidad de integrar a los municipios, y a los Intendentes de manera personal, en el programa de control de la actividad industrial de la cuenca Matanza Riachuelo. De esta manera, lo que se pretende es que el control de la actividad no sólo sea desarrollado por ACUMAR, sino también por quienes tienen el deber de administrar los intereses locales.

Así, es esperable que las inspecciones por agentes municipales se incrementen para aquellas industrias emplazadas en la Cuenca Matanza Riachuelo, más allá del control ambiental desarrollado tanto por ACUMAR como por los órganos competentes provinciales.